viernes, junio 15, 2007

Cálculo de la importancia de una profesión

En esta sociedad tan materialista en la que vivimos, la gente tiende a calcular la importancia de una profesión por el dinero que ganan gracias a ella. Cuando consigues un trabajo, lo primero que te pregunta tu abuela es cuánto dinero ganas, y si tu mismo te enteras que alguien está ganando más que tú haciendo un trabajo diferente al tuyo, rápidamente vas a pensar que esa persona ha triunfado. Como con tantas otras cosas, el refrán que impera es "dime cuánto ganas y te diré como de importante es tu profesión".

Yo he desarrollado una teoría alternativa que, además de responder mejor a la realidad, es más exacta en su desarrollo. La importancia de una profesión no se debe medir por el dinero que ésta conlleva, sino por la cantidad de minutos que el profesional en cuestión 'tiene derecho' a hacerte esperar. A primera vista (o lectura) puede parecer una tontería, pero si uno (tú) se para a pensarlo no tarda en llegar a la conclusión de que es una teoría muy interesante (y cierta) y que la persona que la ha desarrollado (yo) debe ser también muy interesante (además de existir). Resumiendo los diez folios que he escrito al respecto (personal communication, Vol 104,100-110, 2007), la teoría se fundamenta en los siguientes puntos: (i) esperar es una de las cosas que menos nos gusta hacer a los humanos (en los países occidentales); (ii) casi todo el mundo está dispuesto a pagar dinero para evitar esperar (e.g. coger un avión para ir al Caribe, en lugar de ir en barco); (iii) esperar es por tanto más importante que el dinero; y (iv) si un profesional se puede permitir el lujo de hacerte esperar (y tú le esperas allí sentadito), su profesión es muy importante.

Admito que en ciertos casos se da una correlación entre el "dinero" y el "tiempo de espera", pero como veréis a continuación es simplemente un caso de covarianza donde la componente principal es la espera. Hagamos una breve lista de profesiones, el dinero que estos ganan y el tiempo que uno está dispuesto a esperarles:

1. el repartidor de la lavadora que compraste ayer
- dinero: poco
- tiempo de espera: días
- importancia: mucha (el poder en manos del repartidor y su capacidad de hacernos sufrir)

2. dentista
- dinero: infinito
- tiempo de espera: infinito
- importancia: infinita (sin comentarios: es un caso claro de sufrimiento en stand-by)

3. becario de investigación
- dinero: ínfimo
- tiempo de espera: inexistente
- importancia: nula (sin comentarios: es un caso claro de inexistencia indiferente)

4. burócrata de la administración
- dinero: aceptable
- tiempo de espera: tiende a infinito
- importancia: alta (sin ese papel que tiene que sellarte estás perdido)

5. pescador de cangrejos en Alaska
- dinero: espectacular
- tiempo de espera: 0
- importancia: baja (se mueren muy a menudo)

6. A rellenar en tu mente...

¿Queda alguna duda sobre qué es lo que hace a una profesión 'importante'?

Espero haberos convertido a la teoría del tiempo de espera profesional, y que en vuestra próxima entrevista de trabajo no preguntéis cuánto ganaréis sino cuánto tiempo podréis hacer esperar a la gente. De todas formas, si alguien encuentra un contraejemplo le rogaría que lo escribiera en los comentarios, no vaya a ser que mi teoría sea falsa y me lleve a cometer un error: estoy buscando trabajo y me han ofrecido ser consultor a tiempo parcial ganando mucho dinero o convertirme en repartidor on-demand de papel higiénico en baños públicos.

3 comentarios:

Javifields dijo...

¡Si! ¡Lo tengo! (el contraejemplo)
En la tira cómica que os contaba el miércoles en el japonés-Paco:
el prof. de univ.
No llevarse a engaño. Un contraejemplo quizás no descarte la teoría, sino que sólo sea la excepción que confirma la regla.

Jordi Casanovas dijo...

Contraejemplo a analizar:

- profesión: piscinero (chulo piscinas).
- dinero: en invierno poco, en verano menos poco.
- tiempo de espera: en invierno cero, en verano la eternidad.
- importancia: ?¿?¿?¿?

Ra y Mon dijo...

Gracias por iluminarme, javifields y chulo-piscinas ;-) He pospuesto la decision sobre mi futuro. Ademas, estoy contemplando una nueva posibilidad: copistero. Puedes cobrar un monton por encuadernar las tesis y al mismo tiempo puedes hacer esperar un monton sin temor a que el doctorando se vaya con la tesis a otro sitio...

De todas formas, el chulo-piscinas es muy importante. Entre otras cosas, porque si le tratas mal se le puede ir la mano con el cloro ;-)