lunes, noviembre 12, 2007

El rey, Chávez y Zapatero

Del ya famoso 'incidente' de la cumbre iberoamericana yo me quedo con una frase posterior de Zapatero explicando por qué había salido en la defensa de Aznar:

"Si alguien ataca a un compatriota, le defiendes"

Esa es una idea tan asimilada por todos, que muy poca gente se para a pensar en la solemne tontería que hay detrás de ella; es más, creo que si preguntáramos por la calle la opinión de la gente, la mayoría afirmaría estar de acuerdo con ese postulado: "si alguien ataca algo o alguien de mi país, región, continente o familia, yo voy a defenderlo, sea lo que sea". Y esos pocos que afirmen no compartir la frase en cuestión, ante la situación real, enfrentados a un extranjero o extraño que critique algo de nuestra ciudad o de un familiar, tampoco podrán resistir el impulso de salir en defensa de esa horrible plaza o de ese odioso hermano. La mejor prueba de que esto es cierto la hemos vivido cada uno en nuestra propia piel... Yo, muchas veces me he visto defendiendo aspectos de mi país que detesto, por el simple hecho de que no me gusta que el criticador sea un extranjero.

Y yo me pregunto: ¿por qué? ¿por qué mi opinión sobre una frase tiene que cambiar en función de quien la haya formulado? ¿por qué Zapatero estaba obligado a salir en defensa de Aznar? Independientemente de que Chávez sea un bocazas populista y que den ganas de cerrarle la boca cada vez que habla, ¿por qué defendió Zapatero a Aznar? Creo que la respuesta es muy simple: porque Chávez no es un compatriota y Aznar sí. Si en lugar de Chávez, las críticas hubieran venido de, pongamos, Chaves, Zapatero no sólo no hubiera defendido a Aznar sino que hubiera aplaudido las palabras del presidente de la junta de andalucía.

Si todos aprendiéramos a juzgar al interlocutor por lo que dice y no por quién es, la vida sería mucho más sencilla. Y esto se puede aplicar a la política, al deporte, a la ciencia, a ...


3 comentarios:

Javifields dijo...

yo creo que la frase de Zapatero es muy desafortunada; sin embargo pienso que en esa situación estaba obligado a "defender" a Aznar, no como compatriota, sino por otro motivo: como presidente de un gobierno que debe defender al presidente anterior de gobierno del mismo país, de un ataque personal inaceptable en un foro internacional (Aznar será lo que queramos, pero no fascista)

y en el "trío" mencionado en el título de la anotación creo que falta quien peor actuó: la presidenta de Chile, que no supo poner orden en la sesión y motivó la --en mi opinión-- muy desafortunada intervención de nuestro jefe de estado

Gon dijo...

Yo tampoco estoy de acuerdo en que la defensa de Aznar fuese por defender a un compatriota. Creo que fue más el intentar mantener un discurso dentro de lo que es la línea de respeto que debe existir en una cumbre.

Ra y Mon dijo...

Sí, estoy de acuerdo con vosotros, quizás no fui todo lo claro que debí ser en mi escrito. Yo también pienso que Zapatero hizo bien en pedir respeto por Aznar. Lo que no me gustó fue su explicación posterior, la frase concreta de que a un compatriota siempre hay que defenderle, diga lo que diga, haga lo que haga.